lunes, 26 de marzo de 2012

en la vida real...con Ernesto Oroza

Ernesto Oroza en Hablando de Espacio

Antropólogo social, pudiéramos decir de nuestro invitado. A Ernesto Oroza sólo lo conocíamos de referencias, pero cuando se hablada de entender el diseño y la creatividad social del cubano, se hacía cita obligada a su trabajo. Entender el diseño y la arquitectura más allá de los límites académicos; cuestionar el papel del profesional ante una sociedad que “violó” las reglas establecidas para el espacio y el hábitat, son elementos que Ernesto Oroza plantea en su plataforma conceptual para llegar a resultados muy interesantes y polémicos.


Ernesto Oroza (La Habana, 1968) comienza en el mundo del diseño en el Instituto Politécnico de Diseño Industrial (IPDI), y más tarde en el Instituto de Diseño Industrial (ISDI) hasta graduarse en el año 1993. Trabaja realizando diseño de interiores para proyectos del turismo con los arquitectos Luis Rubio y Universo García en la EMPROY 2. En el año 1995 se inicia como docente en el IPDI aprovechando las ventajas de tiempo flexible para desarrollar las investigaciones que lo inquietaban: una sociedad produciendo objetos extraordinarios y sin ser documentados. Comienza su investigación/proyecto sobre la relación de la sociedad con sus objetos, y la manera de los individuos de crear sus objetos de la necesidad. Trabaja en la Fundación Ludwing, donde desarrolla varias investigaciones como “La creación popular cubana en los 90” o “Rikimbili: Un estudio sobre desobediencia tecnológica y otras formas de reinvención en Cuba”, al mismo tiempo que realiza exposiciones como “Agua con Azúcar (1996)” y “En la vida real (2003)”. En el año 2007 Ernesto Oroza gana la beca Guggenheim a lo que se suceden múltiples conferencias, exposiciones y publicaciones en varias instituciones internacionales y la concatenación de investigaciones, todas relacionadas con la sociedad y sus necesidades. Compartimos este material editado para la web, pero “En la vida real” nosotros lo que queríamos era entrevistar a Ernesto Oroza.

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